El tren turístico dejará de funcionar en enero tras haber tenido un sobrecosto del 51 por ciento en su construcción, altos costos en su operación que superan los 55 millones de pesos y baja afluencia.
En la conferencia matutina del gobernador Miguel Barbosa, Juan Carlos Moreno Valle, director de Carreteras de Cuota, dio a conocer los detalles por los cuales dejará de operar el atractivo turístico que se inauguró en el 2017 bajo la administración de Rafael Moreno Valle.
Dentro del desglose que se realizó se encuentra la detección de un sobrecosto del 57.1 por ciento en la construcción, toda vez que este tuvo un precio de mil 571 millones de pesos, cuando se había planeado que fuera de mil millones de pesos, además de que el 69 por ciento de los recursos fueron entregados a través de adjudicaciones directas.
Asimismo se detalló que para la operación del tren turístico, se destinan alrededor de 55 millones de pesos al año, toda vez que para el mantenimiento y funcionamiento del mismo se erogaban cuatro millones 872 mil pesos.
De igual manera se daban 260 mil pesos a la empresa Ferrosur, debido a que cobraba mil pesos por cada trayecto, además de que se tiene un contrato de 30 años con dicha empresa.
El alto costo para las finanzas públicas y la poca afluencia que tenía fueron determinantes para la suspensión del mismo, toda vez que su máximo registro de usuarios fue de 161 mil 403 pasajeros en el 2019, año en el cual se volvió gratuito el traslado.
Juan Carlos Moreno Valle resaltó que con las cifras registradas, el viaje de cada uno de los usuarios le costaba al estado mil 542 pesos, superando los precios de viajes en autobús a destinos como Guadalajara y Acapulco.
El funcionario estatal señaló que el tren turístico dejará de funcionar, mientras se encuentra una alternativa para poder usarlo y sacarle un mejor provecho en comparación al uso que tiene actualmente.
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