Este día vecinos de la colonia Ignacio Zaragoza, informaron de un ataud y del cuerpo de una mujer, de quien presuntamente su familia no se quiso hacer cargo del entierro.
El cuerpo de la mujer fue velado por la noche y al día siguiente sus propios familiares sacaron su ataúd a la vía pública para no correr con los gastos del sepelio.
Gisela de aproximadamente 35 años era indigente. El miércoles falleció en una banqueta de la calle Libertad a causa de una sobredosis de droga. Al día siguiente, una mujer acudió a la Semefo a reclamar el cadáver de Gisela, aseguró que era su madrina e hizo los trámites para poder darle cristiana sepultura.
Los vecinos de la mujer dieron a conocer que la señora tuvo problemas para velar a su ahijada y por ello abandonó el ataúd sobre dos bancos. Los testigos señalaron que en el lugar donde renta la madrina de Gisela le prohibieron velarla y por no tener dinero para los gastos dejó el féretro en la calle.
Los vecinos de Gisela le prendieron veladoras para pedir por su eterno descanso. A la joven fallecida le sobreviven tres hermanos, quienes al igual que ella viven en las calles.
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