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Feminicidio


Fauna Política
La mujer un varón defectuoso
Por Rodolfo Herrera Charolet

“La mujer es defectuosa y mal nacida” Tomas de Aquino

Para lectores poco pacientes o para feministas recalcitrantes, la simple lectura del título y la cita del teólogo de todos los tiempos, sería motivo de una diatriba interminable, en donde algunos improperios contra mi persona y del citado serían lo primero que escriba. Pero si la paciencia y buen juicio nos acompaña, encontraremos explicación de contexto de la afirmación que se ha repetido durante años, por la cual, los anticatólicos o ateos pretenden enlodar un juicio o dictamen.

Como ocurre con el pueblo inculto o poco atento a la lectura, los comentarios superficiales y de los detractores suelen apuntar fuera del tema de fondo para abrir nuevos frentes de lucha estéril. Es el caso, que el simple título y cita, nos lleva a creer que la mujer es pisoteada en el occidente cristiano, como en cualquier otra cultura y tiempo, generalizando que los teólogos referidos son misóginos, cuando es todo lo contrario.

Santo Tomás de Aquino [1], Summa Teológica afirma:

“En lo que se refiere a la naturaleza del individuo, la mujer es defectuosa y mal nacida, porque el poder activo de la semilla masculina tiende a la producción de un perfecto parecido en el sexo masculino, mientras que la producción de una mujer proviene de una falta del poder activo.”

El primer problema al que se enfrenta la cita, es al contexto en la cual se encuentra, mutilado en su extensión y objetivo, se interpretaría como una apreciación misógina del teólogo. Sin embargo, al agregar el contenido que fue deliberadamente omitido, cambia el sentido y apreciación del enunciado, que se opone a la posición ortodoxa de la época.

“Pero si consideramos a la mujer en relación con toda la naturaleza, no es algo ocasional, sino algo establecido por la naturaleza para la generación. La intención de toda la naturaleza depende de Dios, Autor de la misma, quien al producirla no sólo produjo al hombre, sino también a la mujer.”

Tomando de la vasta obra del Teólogo, la primera parte que se refiere a Dios, la creación y las criaturas, encontramos en su tema XCII “el origen de la mujer", que aborda con cuatro artículos, el primero de los cuales inicia preguntándose si el Creador “Al producir las primeras cosas, ¿debió o no ser hecha la mujer?

Para los que no han leído o no conocen la estructura de la Summa Teológica, debe saberse que el autor inicia cada tema listando objeciones, luego agrega un argumento de autoridad, para concluir con una opinión o respuesta.

Así que la cita endilgada al Teólogo, es parcialmente fundada, en virtud de que ciertamente lo dice, pero en el sentido de un enunciado de objeción, el cual someterá posteriormente al argumento de autoridad y finalmente concluir con una opinión que dista mucho del sentido original que se le atribuye.

Aristóteles en el libro De Generat. Animal.: afirma que la mujer es un varón frustrado. Pero en la primera creación de las cosas no era conveniente que hubiera nada frustrado ni imperfecto. Por lo tanto, en la primera institución de las cosas no debió ser hecha la mujer. La idea de la inferioridad de la mujer se remonta a los griegos desde el representante de la filosofía clásica y cuando el Teólogo hace una paráfrasis del enunciado, como objeción escribe:

Considerada en relación con la naturaleza particular, la mujer es algo imperfecto y ocasional. Porque la potencia activa que reside en el semen del varón tiende a producir algo semejante a sí mismo en el género masculino. Que nazca mujer se debe a la debilidad de la potencia activa, o bien a la mala disposición de la materia, o también a algún cambio producido por un agente extrínseco, por ejemplo los vientos australes, que son húmedos, como se dice en el libro De Generat Animal. Pero si consideramos a la mujer en relación con toda la naturaleza, no es algo ocasional, sino algo establecido por la naturaleza para la generación. La intención de toda la naturaleza depende de Dios, Autor de la misma, quien al producirla no sólo produjo al hombre, sino también a la mujer.

El Teólogo no expresa un juicio religioso o de valor con respecto a las mujeres, sino que está repitiendo una opinión científica, que de conformidad con la época, era la disponible.

En aquella época, siglo XIII, el único hecho conocido sobre la reproducción humana era la necesidad de la relación sexual coital, en donde el aporte masculino (semilla) interrumpía el ciclo menstrual al producirse el embarazo, en un proceso similar al de las plantas que era ampliamente conocido. De ahí que para producir un nuevo humano, era necesaria la semilla (seminis=semen) masculina y de encontrar un lugar fértil en el cuerpo femenino. Atribuyéndosele al hombre la “potencia activa” en el proceso.

Porque la potencia activa que reside en el semen del varón tiende a producir algo semejante a sí mismo en el género masculino.

La lógica desde la similitud de procesos, con la información disponible, si una semilla de hombre produce un hombre, existe un defecto en el proceso cuando da origen a una mujer y se explica, como una; “debilidad de la potencia activa, o bien a la mala disposición de la materia, o también a algún cambio producido por un agente extrínseco, por ejemplo los vientos australes, que son húmedos”.

Tras la invención del microscopio, en 1672 (S.XVII) el anatomista católico holandés Regnier de Graaf (1641-1673) [2], quien estudió los túbulos seminíferos, los conductos deferentes, el cuerpo lúteo (folículo de Graaf) y la función de las trompas de Falopio, postulando la existencia de los óvulos y su participación en el proceso reproductivo de los mamíferos que confirma la conclusión a la que llegó Santo Tomás: “…la mujer…  no es algo ocasional, sino algo establecido por la naturaleza para la generación… Dios…  al producirla no sólo produjo al hombre, sino también a la mujer.”

Como podrá observarse, muchas veces se repiten los errores o intencionalmente se oculta el verdadero sentido de las cosas, cuando no se indaga le fondo de las cosas. Porque no se puede ser claro con quien no es atento.
¿O no lo cree usted?


Referencias:
[1] Nació en Nápoles reino de Sicilia en 1224 o 1225, murió el 7 de marzo de 1274 a la edad de 50 años.
[2] Nació el 30 de julio de 1641 y murió el 17 de agosto de 1673 a la edad de 32 años.

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