Tras las rejas, El Chaparro violador

La justicia tardó en ajusticiarlo porque el agresor buscó la protección de la justicia federal, pero al final fallaron en su contra. Lo sentencian a 46 años de prisión
Alfonso Ponce de León Salgado/Intolerancia

Abel Mazapila Camacho, quien también dice apellidarse Mazadila Camacho, fue sentenciado a cumplir una pena privativa de la libertad de 46 años de prisión, tras haber participado en tres ataques de violación a jovencitas, en el año de 1993, en la zona de Bosques de Manzanilla, en tanto que otros implicados en los ataques sexuales aún permanecen “a salto de mata”, tras existir órdenes de aprehensión en su contra.

Mazapila o Mazadila, a quien le apodan “El Chaparro”, fue ayer llamado a la reja de prácticas del Juzgado Tercero de lo Penal, donde el juez Carlos Guillermo Ramírez Rodríguez le notificó que había sido encontrado culpable de tres casos de violación en agravio de Vianey, Verónica y Lucia N. quienes presentaron sendas denuncias en su contra y por lo que le integraron dos procesos: el 126/996 y el acumulado 478/98.

Pero además de cumplir una de las penas más rigurosas en casos de violencia sexual el interno del Centro de Readaptación Social (Cereso) de San Miguel deberá de pagar una multa de 636 días de salario mínimo y deberá cumplir su condena completa, luego de que se trató de tres víctimas, lo que lo convierten en un delincuente de peligro.

Abel Mazapila, “El Chaparro”, de oficio albañil, ingresó en los primeros días del mes de enero de 1996, bajo los cargos de violación, fue detenido por elementos de la Policía Judicial del Estado, quienes lo esperaron a las afueras de su domicilio, ubicado en calle Bugambilias sin número de San Mateo Mendizábal, del municipio de Amozoc de Mota; para ese entonces tenía 40 años de edad.

El detenido negó los cargos que el Ministerio Público presentó en su contra y solicitó la protección de la justicia federal, en el Juzgado Primero de Distrito, sin embargo ésta le fue negada.

Las víctimas

El 5 de mayo de 1993, a las 18:00 horas, Abel sorprendió a Lucía y al novio de ésta cuando se encontraban en la Hacienda de la Resurrección, valiéndose de un machete amagó al novio a quien obligó a quedarse acostado en el piso, mientras que él violaba a la jovencita, luego se dio a la fuga.

El primero de noviembre de 1993, a las 17:00 horas, Abel Mazapila, alias “El Chaparro”, acompañado de otros sujetos, cuyos nombres no han sido revelados, interceptaron a Vianey y a Verónica N, quienes iban acompañadas de sus novios.

Cuando se encontraban en las inmediaciones de Bosques de Manzanilla, a los hombres los llevaron a una barranca donde uno de ellos los cuidaba, amagándolos con un arma de fuego, mientras que las jóvenes fueron llevadas a unas cuevas donde fueron violadas.